Los tiempos han cambiado, durante millones de años atrás se creyó que el ser humano debía tener sólo una profesión, recuerdo haber leído el libro "La República" de Platón en donde su filosofía hacía alarde de un oficio único. Ese pensamiento es tan contrario al que discutí una vez en horario de oficina con otro diseñador, llegamos a la conclusión de que actualmente las empresas buscan a un "One Man Army" es decir un hombre que sea un ejercito de conocimiento por sí mismo.
¿Por qué hago ese tipo de introducción? porque quiero hablar del juego Journey de Playstation 3, que destaca más por su arte que por otra cosa, no es la primera vez donde la estética triunfa ante la jugabilidad, sin esta última ser mala, podemos destacar obras maestras como "Okami, Shadow of the Colossus, I.C.O, entre muchos otros títulos que hacen que los mismos críticos duden de la eterna pregunta: ¿Son los vídeojuegos arte?.
No sé si Journey de PS3 llegue a ser una obra de arte, pero su estética simplista y a la vez hermosa, me hacen pensar que las mejores armas del diseño, se encuentran en la masticada frase: "Menos es más". El proyecto es obra de That Game Company.
Journey o viaje en español es una aventura anónima nos relata la historia de un viajero que interactúa con muchos otros personajes. Te despiertas solo y rodeado por millas de la quema, enormes desiertos, y pronto descubre la cima de la montaña que se convertirá en el destino.
Los videojuegos son cada vez más variados, y se acercan poco a poco a la clasificación de arte, no es de extrañarse de un mercado que da muchos más beneficios que la música y cine juntos. Al igual que los diseñadores, que cada vez se convierten en algo más que sólo diseño, con la constante de aprender otras técnicas, 3d, programación en varios lenguajes, maquetación digital para Tablets. Si Platón estuviese vivo, entendería como han cambiado los tiempos.
